Trump obtuvo el triunfo electoral por 306 a 232 votos electorales; sin
embargo, Hillary Clinton fue la más votada, obteniendo 61, 782,016; es decir 947,
579 votos más que Trump. La victoria de Trump se debió a que entendió que en
las elecciones de EEUU, no siempre más significa mejor; pero también, a otros
factores que a continuación repasamos.
EL PÚBLICO OBJETIVO:
Un ejemplo de que tan importante como la cantidad de dinero que
tengas, es como lo utilices, es la manera en que el candidato republicano
gestionó sus fondos de campaña. Si Trump no gastó todos su miles de millones en
publicidad, hablando metafóricamente, si lo hizo en tratar de entender la mente
del ciudadano EEUU.
Los principales Estados, eran conservadores y sufrían por el desempleo
causado por el cierre de las fábricas debido a la suscripción del NAFTA,
tratado que Clinton apoyó.
Asimismo, los Estados tradicionalmente republicanos son menos
propensos a dar su voto a un candidato demócrata. En cambio los Estados
tradicionalmente demócratas, pueden darle su voto a un candidato republicano,
si su candidato no les convence.
LA ESTRATEGIA:
Conociendo esto, Trump eligió un discurso conservador asegurándose los
Estados republicanos y conociendo que los Estados demócratas, cansados del
status quo, podían brindarle su apoyo. En cambio Clinton, utilizó un lenguaje
totalmente liberal, sabiendo que el voto republicano era difícil de obtener,
buscó asegurar el voto demócrata.
Clinton utilizó la misma estrategia en todos los campos de batalla; en
cambio Trump, planteó algunas estrategias distintas en función al conocimiento
que tenía de su público objetivo.
El voto latino, es un ejemplo de esto. Clinton no supo ver la
diferencia entre un ciudadano EEUU de origen latino y un latino que no era
ciudadano. Los intereses que mueven a un ciudadano EEUU de origen latino, son
muy semejante a los intereses que mueven a cualquier otro ciudadano EEUU. Ellos
ven a los extranjeros como amenazas a sus puestos de trabajo (este es el caso
de los Puertorriqueños). Este desconocimiento de Clinton hizo que perdiera
estados como Florida.
Clinton, no cayó en la cuenta que los extranjeros no votan en EEUU, y
en ningún otro país.
EL MENSAJE:
En la primera campaña electoral de Barack Obama, que lo llevó a
convertirse en el primer presidente afroamericano de EEUU, éste se centró en el
medio del Mensaje, más que en su contenido –el mensaje era en sí mismo muy
simple: trabajo, educación, salud, oportunidades-. El esfuerzo se enfocó en cómo
hacer llegar ese mensaje. Con este propósito se utilizó el Marketing Filial, poniendo
al servicio del Mensaje las redes sociales, los correos electrónicos, los
mensajes de textos, entre otros.
Trump, apostó por la forma del Mensaje. Conocedor de cómo
funcionan los medios de comunicación
masivos, sabía que en la TV una media sonrisa no causa emoción, o colores
suaves en la vestimenta no impresionan, un mensaje tibio no convence; por
tanto, el Mensaje tenía que ser extremo y exagerado. Los medios de comunicación
masivos no distinguen matices: eres sincero o eres hipócrita; eres corrupto o
eres honrado; eres bueno para hacer que las cosas pasen o sólo eres un demagogo.
Asimismo, llevó el antagonismo al extremo más primitivo. Por contraposición,
si tu oponente es corrupto, tú eres honrado. Es necesario recalca que Hillary
Clinton como un peleador de Jiu Jitzu poco experimentado, sólo intentaba
neutralizar los amagos de sumisión de Trump.
Trump, fue más allá asegurando que los medios de comunicación, incluso
los que apoyaban a su oponente, le publicitarían de manera gratuita. Y así
ocurrió, sabía que todo producto nuevo debe llamar la atención si quiere tener
una posibilidad de ser comprado; bajo este precepto, construyo todo un
personaje irreverente que tenía como único objetivo llamar la atención de los
medios, convirtió cada discurso en un espectáculo. Sin lugar a duda para los
medios significaba mayor audiencia transmitir las desfachateces de Trump decía,
que los comentarios correctamente políticos de Hillary. Y como dicen: No hay
publicidad mala.
AUTORIDAD:
Una de las grandes preocupaciones del ciudadano EEUU, era la
seguridad. Al Qaeda, el Estado Islámico, son amenazas latentes y reales. La forma
de actuar de estos grupos es agresiva. El modelo de Barack Obama, no parece
haber solucionado el problema, acusándosele de mantener una postura blandengue.
Trump, buscaba comprobar que él no era blandengue a diferencia de su
oponente, y lo probó por contraste. Los insultos y amenazas dirigidos hacía sus
oponentes, buscaban transmitir el mensaje que si Clinton y compañía no tenían
el carácter suficiente para hacerle el pare a un abusador de atrio, menos
tendrían el carácter para enfrentarse al grupo terrorista más peligroso de la
Historia. Otra vez punto para Trump.
ALEJÁNDOSE DEL “MÁS DE LOS
MISMO”:
Clinton y compañía representan al político tradicional, al establishment. Un político por lo demás
con una imagen paradójica. Por un lado tiene las maneras y el estilo de vida de
una familia conservadora, por otro lado tiene ideas liberales. Esto causó una
brecha en la percepción que los votantes tenían de ellos; y si a esto le sumamos los correos, el efecto cobra mayor envergadura.
Trump, decidió alejarse de esta imagen, revirtiendo la combinación: él
tendría una imagen liberal, e ideas conservadoras. Trump, era diferente a los
políticos tradicionales, por tanto lucía, hablaba y pensaba de manera
diferente.
UN POCO DE TEORÍA DE JUEGOS:
Ambos candidatos tenían dos estrategias a elegir: o elegían un mensaje
conservador, o caso contrario elegían un
mensaje liberal.
Si ambos elegían mensaje Conservador, la ventaja era para Trump. Recordemos
que los votos de los estados republicanos no eran negociables. Si ambos elegían
un mensaje liberal, la ventaja era para Clinton; si Clinton elegía un mensaje
conservador –bajo el supuesto que quisiera agradar a los estados republicanos-,
y Trump elegía un mensaje liberal, la ventaja era para Trump; si Clinton elegía
un mensaje liberal y Trump un mensaje conservador –tal como sucedió-, la
ventaja era para Trump.
Si las cosas estaban tan claras ¿por qué Clinton continuó hasta el
final? Trump, parecía ser una presa fácil, él era un advenedizo en la política y
ella se encontraba posicionada.
Según los cálculos, todos los posibles candidatos hubiesen elegido la
estrategia liberal. Elegir una estrategia conservadora (es decir
recalcitrante), implicaba el riesgo de quedarse con mala imagen, si es que no
se ganaba. Sin embargo, a Trump esto no le importó. A este tipo de jugador en
Teoría de Juegos se la llama Kamikaze.
Al final como aseguró Michael Moore, la derrota de Clinton era una “Crónica
de una Muerte Anunciada”. Si deseas ver el artículo de Michael Moore, puedes
hacer clic en el siguiente vínculo: 5 REASONS WHY TRUMP WILL WIN